ABOGADOS DE INCAPACIDAD PERMANENTE EN MÁLAGA

Claro, tenemos la opción de una reunión cara a cara, vía telefónica o a través de videollamada.

El grado de incapacidad permanente que se otorga depende de la gravedad y naturaleza de las afecciones, además de considerar las limitaciones que estas generan en tu trabajo habitual o cualquier otro tipo de empleo. 

Evaluaremos tu caso sin coste alguno y te brindaremos orientación y asesoramiento. Hay 5 tipos de pensiones de incapacidad permanente, y para cada una de ellas tenemos a los expertos adecuados:

1. Abogados especialistas en Incapacidad Permanente Parcial: Implica limitaciones que afectan al menos el 33 % de las actividades laborales habituales, aunque se puede seguir trabajando en el puesto actual.
2. Abogados especialistas en Incapacidad Permanente Total para la profesión habitual: Limitaciones graves para el trabajo habitual, pero posibilidad de laborar en otros empleos.
3. Abogados especialistas en Incapacidad Permanente Total cualificada para mayores de 55 años: Similar a la total, pero con un aumento del 20 % en la pensión y restricciones para buscar otra actividad.
4. Abogados especialistas en Incapacidad Permanente Absoluta: Incapacidad total para cualquier tipo de trabajo.
5. Abogados especialistas en pensiones de gran invalidez: Cuando se necesita asistencia para tareas diarias como aseo, medicación o alimentación.

Además, ofrecemos asesoramiento sobre incapacidades temporales. La vía administrativa es el primer paso para resolver disputas con entidades gubernamentales.

Estas son algunas enfermedades que pueden conducir a la incapacidad permanente: Alzheimer, aneurisma, artritis reumatoide, artritis psoriásica, artrosis, cáncer, enfermedades cardíacas y colitis ulcerosa, entre otras.

Si las enfermedades que sufres te impiden trabajar o tu médico te ha recomendado solicitar una pensión debido a las secuelas, nuestro equipo está aquí para ayudarte a obtenerla. Evaluamos tu situación sin costo alguno y, si es posible, iniciaremos inmediatamente el proceso para obtener la pensión por incapacidad que necesitas.

Una vez que el equipo de valoración de incapacidades del INSS (EVI) ha evaluado al trabajador, se envían dos documentos por correo certificado: la resolución del INSS y el Dictamen Propuesta. Por lo general, esto sucede aproximadamente entre 30 y 40 días después de la visita al EVI. Estos documentos son esenciales, ya que notifican al interesado si se concede o deniega la incapacidad permanente, junto con los motivos detrás de esa decisión administrativa. En este papeleo se detalla el grado de incapacidad otorgado, que puede ser parcial, total, absoluta o gran invalidez. También se indica un plazo de 30 días para apelar en caso de desacuerdo con la decisión o el grado concedido, así como la fecha en la que ambas partes, tanto la Seguridad Social como el interesado, pueden solicitar la revisión de la incapacidad permanente.

La solicitud se realiza ante el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) o entidades equivalentes para funcionarios. Para asegurar un procedimiento exitoso y evitar errores irreversibles, es recomendable que un abogado especializado en incapacidad permanente en Málaga se encargue de ello. Este profesional revisará minuciosamente la documentación médica y determinará qué informes son necesarios para respaldar la solicitud.

Generalmente, la fecha del hecho causante se fija en el Dictamen Propuesta del Equipo de Valoración del INSS, que se adjunta a la resolución del INSS. A partir de esa fecha establecida en el documento, comenzarás a recibir la pensión por incapacidad. En algunos casos, es posible recibir la pensión desde el final de la incapacidad temporal o incluso desde que se solicitó la pensión. Sin embargo, cada caso de incapacidad permanente es único y requiere un estudio o análisis detallado para determinarlo.

Por supuesto, es importante defender tus derechos y buscar una reclamación. Estamos aquí para asistirte. Revisaremos sin coste alguno tu historial médico, identificaremos posibles errores y presentaremos la Reclamación Previa al INSS. Además, si decides presentarla, te proporcionaremos 10 consejos sobre qué acciones tomar y cuáles son los plazos a considerar. 

Según nuestra experiencia como abogados especializados en incapacidades permanentes, cuando el INSS concede la pensión, en el dictamen propuesta suele indicarse el plazo para la revisión. Por lo general, este plazo es de dos años desde la fecha de la resolución administrativa. No obstante, en ciertas ocasiones, podría especificarse un periodo más corto, como un año o seis meses.

Sí, la pensión puede ser revisada, pero solo podrían retirarla si tus condiciones médicas han mejorado y ya no limitan tu capacidad para trabajar. Si eso no ha ocurrido, podrán examinarla, pero no tendrían la facultad de quitártela.

El INSS ha evaluado de manera incorrecta mis limitaciones laborales, otorgándome un grado de pensión inferior al que creo merecer. Revisaremos tu caso sin coste alguno y emprenderemos las reclamaciones necesarias para obtener el grado de pensión que realmente mereces.

Entiendo tu desconcierto, especialmente si las lesiones o secuelas que enfrentas son crónicas y no han mejorado, pero inexplicablemente te han retirado la pensión. Revisaremos tu expediente sin costo alguno y te apoyaremos para recuperar la pensión con efectos retroactivos.

Resulta desconcertante que te hayan reducido el grado de incapacidad permanente cuando tus enfermedades no han mostrado mejoría. Revisaremos lo ocurrido y gestionaremos la reclamación para restablecer el mismo nivel de pensión por incapacidad permanente que tenías previamente.

Varios aspectos influyen en el monto a recibir, como el grado de la pensión de incapacidad permanente, tu edad, las contribuciones a la Seguridad Social de los últimos años trabajados y si las limitaciones laborales son producto de una enfermedad común o de secuelas de enfermedades o accidentes laborales.

Claro, si hace falta (no siempre es el caso), te guiaremos en la selección. Trabajamos con especialistas en medicina laboral e incapacidad permanente que podrían asistirte, aunque la decisión final sobre su contratación será tuya.

Esta situación suele causar confusión al trabajador, ya que piensa que se le ha concedido la pensión de incapacidad que solicitó al INSS. Sin embargo, lamentablemente no es así y en la mayoría de los casos termina con el alta médica del trabajador. No te preocupes, estaremos aquí para ayudarte a lograrlo.

Lamentablemente, más de lo deseable. En muchos casos, el proceso implica agotar primero la vía administrativa con una reclamación previa y, si el INSS no la concede, llevar el expediente al juez. Los plazos aproximados son:

30 a 45 días para la valoración del INSS (EVI) desde la solicitud de la pensión.

Hasta 135 días para recibir la resolución administrativa.

30 días para presentar una Reclamación Previa si la resolución no es favorable.

45 días para responder a la Reclamación Previa presentada al INSS. Si no responden, se considera denegada por silencio administrativo y se puede iniciar una demanda judicial.

30 días para presentar una demanda judicial si ha sido denegada por el INSS o no han respondido.

De 2 meses a 1 año para la celebración del juicio desde la presentación de la demanda, dependiendo del juzgado y la ciudad.

30 días para recibir la sentencia del Juzgado de lo Social después del juicio.

5 días para anunciar un recurso de suplicación ante el Tribunal Superior de Justicia.

10 días para presentar un recurso de suplicación.

De 6 a 8 meses para resolver el recurso de suplicación por parte del Tribunal Superior de Justicia.

No hay una lista de enfermedades actualizada de incapacidad permanente. Cualquier condición médica puede limitar la capacidad para trabajar de manera normal, aunque se considerará el grado de afectación, las secuelas, la edad del trabajador y la profesión que desempeñe.

Claro, incluso si no estás empleado, se considera una situación similar al trabajo y mantienes tus derechos. Asegúrate de haber renovado tu registro de desempleo, sin importar si estás recibiendo o no pagos por desempleo o un subsidio. Estar buscando empleo no afecta la posibilidad de que el INSS otorgue una pensión por invalidez.

Puedes volver a solicitarla en cualquier momento, especialmente si ha pasado un tiempo desde que fue rechazada y tus condiciones médicas han empeorado. Sin embargo, es importante saber que el INSS revisará la solicitud con mayor rigurosidad. Por eso, es muy recomendable presentar el nuevo expediente con la ayuda de un profesional para evitar errores.

Independientemente de si decides apelar la decisión de denegación, es importante seguir trabajando para mantener tus derechos. Sin embargo, si tus limitaciones físicas o mentales te impiden desempeñar tu trabajo, es recomendable solicitar a la empresa el uso de tus vacaciones pendientes o incluso una evaluación médica de riesgos laborales. Faltar al trabajo sin justificación puede conllevar sanciones o incluso despidos por parte del empleador, así que actúa con precaución. En estos casos, es prudente buscar asesoramiento legal para entender los pasos más apropiados a seguir, ya que cada situación es única. En ocasiones, trabajadores con enfermedades crónicas y largos períodos de baja son dados de alta sin razón médica al agotarse los plazos de incapacidad temporal, aunque sus enfermedades no se hayan curado. Esto puede generar conflictos con el INSS, pero en muchos casos, luchando se consigue obtener la pensión de incapacidad permanente.

No, el INSS ha otorgado un tipo de pensión que impide al trabajador realizar cualquier actividad laboral. En ocasiones excepcionales, si se considera que cierto tipo de trabajo puede mejorar la calidad de vida del trabajador dadas sus condiciones médicas, se puede permitir cierta actividad laboral compatible. Sin embargo, esto es poco común y generalmente no se permite.

Sí, siempre y cuando sea compatible con la pensión otorgada. Sin embargo, es recomendable consultar previamente a la administración para evitar que el INSS pueda retirarla. Es crucial tener precaución con este tipo de solicitudes, ya que el INSS podría interpretar que ha habido mejorías en las condiciones médicas y tomar medidas para retirar la pensión.

En general, no es posible renunciar a la pensión de incapacidad permanente a menos que haya una mejoría en las condiciones médicas. Sin embargo, es importante analizar cada situación, ya que en ocasiones las cantidades de la pensión son tan bajas que dificultan que el trabajador tenga una calidad de vida aceptable. Si te encuentras en esta situación, contáctanos. Como profesionales, te asesoraremos sobre la mejor opción disponible.